A la hora de enfrentarse a una separación o un divorcio uno de los aspectos más puntillosos es llegar a un acuerdo sobre la custodia de los hijos, el uso de la vivienda familiar etc. Para el buen devenir de los cónyuges, se establece un acuerdo donde se reflejan este tipo de asuntos, pero realmente qué incluyen un convenio regulador, cuándo entra en vigor, se puede modificar.

Aunque haya buen entendimiento entre la pareja, este tipo de documento, siempre es necesario para establecer de manera legal el acuerdo llegado entre ambas partes. En este tipo de situaciones, la figura de un abogado de divorcios resulta fundamental para saber cómo afrontar este tipo de situación y recibir el asesoramiento más personalizado.

Además, si tenemos hijos menores de edad, este convenio deberá ser entregado al Ministerio Fiscal quien se asegurará que no perjudica a los descendientes, y tras este aspecto, será ratificado por un juez. A la hora de hacer frente a este proceso, en el convenio pueden aparecer multitud de condiciones, siendo algunas obligatorias.

Modelo de convenio regulador

Lo primero que debe venir reflejado es el tipo de guarda y custodia de los hijos, en caso de tenerlos. Custodia monoparental, compartida y en este último caso con que alternancia (semanal, quincenal etc.)

Cuando hablemos de custodia monoparental, tiene que aparecer el régimen de visitas y las comunicaciones de los hijos. Sin olvidar otros aspectos importantes como: las vacaciones de verano, Navidad, Semana Santa o días especiales como cumpleaños, día de la madre, del padre etc. Aquí es aconsejable ser lo más conciso posible para evitar conflictos.

Tampoco podemos olvidar el importe de la pensión de alimentos. Se tiene que establecer una cantidad de dinero de manera mensual para aquel padre o madre que no se va a hacer cargo de los niños a diario. Esa cantidad se destinará a las necesidades de los hijos menores de edad y a los mayores o emancipados que no tengan ingresos propios.

Otro punto a establecer es el uso de la vivienda familiar. Esto consiste en decir quién hace uso de ella y cómo se realizará después de la separación. Por último no hay que olvidar de la liquidación del régimen económico, cuando proceda.

Estos son algunos de los apartados que deben aparecer en un convenio de divorcio. De todas formas se pueden incluir cualquier cláusula que los cónyuges consideren oportuno. De hecho cualquier despacho de abogados de familia te aconsejará que cuanto más específico se sea, mejor. Esto evitará discusiones futuras, generando seguridad a cualquier miembro de la familia.

Cuándo entra en vigor un convenio regulador

Una vez firmado el convenio regulador se presenta en el juzgado indicando que se trata de un procedimiento de mutuo acuerdo. Tras este hecho, se citará a las dos partes para su ratificación, y en el caso de que haya hijos menores, se enviará a la Fiscalía para que lo analice y vea que se protegen los derechos de los descendientes.

A continuación, el fiscal elaborará un informe que pasará al magistrado y si ve que no hay ningún perjudicado, dictará sentencia aprobando el divorcio o separación y por tanto el convenio regulador. En ese mismo instante el acuerdo ya es de obligatorio cumplimiento por ambas partes. Si alguno decide incumplirlo, el otro podrá acudir a los tribunales para ejecutarlo.

Estos son algunos de los puntos clave que debe incluir cualquier convenio de divorcio. De todas formas ya hemos dicho que cuanto más conciso se sea mejor. Por eso, en este tipo de contextos la figura de un abogado experto en divorcios toma un papel relevante. Él sabrá cuáles son los aspectos clave y qué debe aparecer en ese acuerdo.